La noche de bodas de Everly resultó ser el comienzo de un viaje salvaje e inesperado. Ella pensó que sería una noche tranquila y romántica, pero su esposo, Scott, tenía una sorpresa guardada. Esa noche, cuando se quedó dormida, agotada por los eventos del día, no tenía idea de que su vida estaba a punto de cambiar. En medio de la noche, Everly se despertó y encontró a Scott sentado a su lado con un bebé en brazos. Confundida y conmocionada, escuchó mientras Scott presentaba al bebé como Ella, su sobrina huérfana. Explicó que su hermanastra distanciada, Maya, había fallecido recientemente, dejando a Ella atrás. Scott confesó que se había enterado de Ella solo unas semanas antes, pero lo había mantenido en secreto, temiendo que Everly lo dejara si lo sabía. Como explicó Scott, Everly sintió una mezcla de traición y preocupación. No podía creer que su esposo le hubiera ocultado un secreto tan importante, especialmente el día de su boda. Lo confrontó y le preguntó cuál era su plan para Ella. Scott admitió que no tenía un plan a largo plazo; Él solo sabía que necesitaba cuidarla. Esta revelación dejó a Everly con una sensación de incertidumbre sobre su nueva vida juntos. ¿Cómo podían empezar un matrimonio con secretos entre ellos? Durante los siguientes días, Everly intentó adaptarse a la vida con Scott y Ella en su casa grande y elegante. Sin embargo, las dudas y preguntas sobre el pasado de Scott persistían. Comenzó a preguntarse sobre la historia de Maya y por qué Scott nunca la había mencionado antes. No podía quitarse la sensación de que había más en el pasado de Scott de lo que estaba revelando.
Un día, mientras caminaba por la playa con Ella, Everly conoció a una mujer misteriosa que parecía saber mucho sobre Scott. El tono desdeñoso y la mirada penetrante de la mujer insinuaban verdades ocultas sobre él. Le preguntó a Everly si Ella era la hija de Scott, lo que provocó aún más preguntas. Después de este encuentro, Everly se enfrentó a Scott nuevamente, y finalmente él admitió la verdad: Ella no era su sobrina; era su hija. Esta noticia impactante destrozó la confianza de Everly. Empacó sus pertenencias y abandonó la mansión de Scott. Pero cuando se fue, se sintió atraída por el profundo amor de Scott por Ella. A pesar de las mentiras, no podía ignorar la conexión que Scott tenía con su hija. Regresó, con la esperanza de que pudieran reconstruir su confianza.
Justo cuando comenzaban a establecerse en una frágil paz, Everly recibió una carta anónima. Insinuaba que Maya podría no ser el único secreto que Scott estaba escondiendo. Decidida a encontrar respuestas, Everly siguió las instrucciones de la carta y conoció a una mujer en un café que decía ser la ex esposa de Scott. Ella le reveló que Scott era peligroso y que Maya había muerto tratando de exponer sus secretos. Se le advirtió a Everly que fuera cautelosa y mantuviera sus descubrimientos ocultos a Scott. Días después, Everly descubrió que estaba embarazada. Atormentada por la advertencia de la ex esposa de que Scott solo quería un heredero varón para algún propósito siniestro, tomó la difícil decisión de interrumpir el embarazo. La ira de Scott cuando se enteró fue aterradora, y justo cuando estaba a punto de arremeter, llegó la policía con la ex esposa, Amanda, a su lado. Pero en un giro inesperado, toda la historia resultó ser una escena de una película. Everly y Scott eran actores y estaban filmando un cortometraje juntos que se había inspirado en un momento gracioso de su noche de bodas.